Mujeres a la conqusita

Querida hijita, antes de iniciar esta carta debo pedirte disculpas, porque cuando supe que llegabas me llene de sentimientos encontrados, dudas, miedos pero también debo reconocer que me daba emoción y alegría, el saber que ya eras parte de mí. Conforme avanzaba mi embarazo aceptaba más tu llegada, más de un susto nos dieron los médicos a tu papi y a mí cuando nos decían que no estabas bien, a pesar de lo mal que me sentía casi a diario, sabía que había un ser pequeñito que dependía de mi para vivir en un mundo oscuro, como me imagino  debe ser el interior de mi vientre. Para que no te asustaras te cantaba canciones, recuerdo cuando iba a trabajar por ejemplo y subía al bus te iba hablando para no contagiarte el miedo que sentía. Lo poco que se me antojaba lo disfrutaba, porque sabía que tú lo pedias, poco me importo perder mi delgadez, mi vientre día a día crecía y era más fuerte sentir tus movimientos, eran como calambritos en mi barriga, el sueño que me daba era insoportabl...

No sé si a ti te pasa… Dicen que uno debe recibir golpes en la vida para reaccionar y solo ahí en aquellos momentos tristes, dolorosos y oscuros reaccionas, despertar  es como caer de un décimo piso, el golpe duele demasiado, quizás ya nunca más despiertes, ¿pero qué pasa  con los que seguimos?, a pesar de ese gran golpe. Escucho, escucho tantas cosas, tantas palabras motivadoras que a veces me aburren y me dan ganas de decir YA BASTA, quiero estar sola…luego reaccionas, claro la vida es bella de hecho empecemos a detallar: Envidiando a los demás. No, valorando lo que tienes. Llorando todo el día. No, porque cuando todo pase seré vieja y fea,   pues las marcas del dolor se habrán penetrado en mi rostro y quizás ya haya enfermado de algo. Diciendo por que no es como yo quiero. Jamás encontraremos a los personajes de los cuentos de hadas, ¿Por qué?, por   más que nos sintamos parte de un cuento, no somos irreales. Dormir diciendo otra vez mañan...

HOY                                                        Hoy tengo ganas de liberarme de las cadenas que me atan a un camino tenebroso. Hoy quiero gritar, correr saltar y decir que estoy viva. Hoy quiero amar más de lo que amo a los míos. Hoy puedo parar darle sentido a mi vida. Hoy arranco de mí  esa angustia, ese dolor, ese miedo que a veces me aborda y no puedo controlar. Hoy despido esas voces que invaden mis pensamientos trayendo cosas negativas a mi vida. Hoy empiezo a despertar de aquella pesadilla en la que yo misma ingrese y perdí las fuerzas para salir de ella. Hoy solo siento que no soy la misma persona de hace unos años, pero sé que la que empieza será mejor. Hoy agradezco a la vida por acogerme en este mundo de problemas. Hoy tratare de no dañar más a los que amo. Hoy empiezo aceptarme como ...

Creo que hay vida… Alguna vez te has preguntado ¿si, habrá vida después de este mundo?, que pasa con el ser humano cuando muere… Cielos jamás pensé escribir este texto pero debo decir lo que pienso: Es difícil aceptarlo pero si hay otra vida y estoy segura que es mejor…antes que mi Princesa Guerrera Mini partiera, siempre soñé que corría en un hermoso campo, era libre, disfrutaba de todo, en mis sueños a veces estaba sola y otras veces con una hermosa niña… como de 6 o 7 años con el cabello ensortijado y muy claro, siempre llevaba un vestidito blanco (pensé en esos tiempos que era mi hija mayor), que equivocada estaba, dicen que el tiempo da las respuestas a tantas incógnitas y designios, pues aunque me cueste creerlo mi vida ya estaba marcada, mi ángel llegaría. Cuando ella partió soñé que era libre de tantas agujas y vías, que algo había pasado por que aunque no me lo crea era una hermosa bebe, en mis sueños recuerdo que me asombre de ver tanta belleza en ella… así paso todo...

La historia dice  que hace muy poco tiempo nació una Princesa, una bella bebe con  tez blanca, con ojos marrones, con cejas y pestañas rubias, con el cabello castaño y con un cuerpecito  frágil,  ella fue elegida por  la gloria del señor. El día que llego causo asombro  y alegría, su llanto incansable hacía suponer que ella tendría unos fuertes y maduros pulmones, una gran corte la rodeo y del vientre de su madre la llevaron a una bella caja de cristal, ahí esa princesa vivió. A la rama de la medicina le causaba asombro su llegada, no creían lo que vivían, las damas de blanco la engreían mucho, mientras sus padres lloraban de alegría  Mini había nacido, mientras su madre tomo fuerza por días para poderla conocer su padre tuvo la suerte de oír llorar a su hija, benditos aquellos que la conocieron y cuidaron. Dice la historia que alrededor de la Princesa habían 11 bebes y que  cada uno desde sus hermosas cajitas de cristal jugaban y conversaba...